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La dimensión de la ciudad de Lisboa tuvo gran crecimiento gracias al desarrollo de los sistemas de transportes públicos, siendo la empresa Carris la gran contribuidora para este progreso. En lo que se refiere a la evolución histórica y tecnológica de Lisboa y de Carris, hay mucho para revivir a través de un viaje en el tiempo con documentos únicos y objetos de valor. Apretad los cinturones y ¡buen viaje!

Inaugurado en 2012, el Museo de la Carris se posiciona como un polo cultural y de más pura memoria viva de los transportes públicos de Lisboa, siendo un verdadero puente entre el presente, el pasado y el futuro.
La memoria viva de los transportes públicos es presentada a través de dos zonas que son recorridas a través de un tranvía del siglo XX. ¿Espectacular, no?

La primera zona describe la evolución de la Carris a través de una exposición de documentos, plantas y dibujos técnicos, pasajes, pequeños objetos, uniformes, entre otros pormenores. La segunda es donde se sitúa el antiguo taller repleto de vehículos representativos de la evolución de los transportes, como los tranvías y los autobuses. También hay diversos artefactos que complementan la información histórica de la Carris y aún otros tipos de maquinaria.

Tras este inolvidable viaje por el tiempo, la gana que se tiene es de recorrer todas las callejas y rincones de Lisboa en los tradicionales tranvías de la Carris. ¿Concordáis?

Sugerencia Cool: En el Museo de la Carris no se vive sólo de recuerdos, pero también de renacimientos, como es ejemplo Village Underground, un espacio de cowork que dio vida a antiguos autobuses de la Carris, creando oficinas para pequeñas empresas y freelancers así como una simpática cafetería, ideal para terminar el viaje por el museo de una forma relajada.